
La segunda publicación, dedicada a la temática de Género y Defensa en el ámbito de las instituciones de la Defensa, Equidad de Género y Defensa: Una política en marcha II, tiene como objetivo principal rendir cuentas públicamente de los compromisos sucesivamente asumidos en la materia.
Este Ministerio se enorgullece en contar con el material que aquí ponemos a disposición de los hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas, de los académicos y académicas, de los funcionarios y las funcionarias de gobierno y del público en general.
El trabajo inicial del Observatorio sobre integración de la mujer fue extendido a lo largo de 2008 hacia el universo compuesto por mujeres y varones cadetes. A diferencia del primer año de trabajo, en esta ocasión, se incluyó expresa y masivamente en la consulta a un número representativo de varones.
Aspectos tales como la dinámica de las relaciones entre ambos géneros, el rol de la masculinidad, el lugar asignado a lo
―femenino‖ y los estereotipos culturales e institucionales asociados a estas categorías, entre muchos otros factores de relevancia, que suelen quedar esmerilados cuando la cuestión de la equidad en razón de género es sólo abordada desde la situación de las mujeres. Dicho de otro modo, una política verdaderamente transformadora y superadora del patrón de desigualdad estructural entre hombres y mujeres reclama mucho más que ocuparnos unilateralmente de ellas.
La agenda de trabajo del Observatorio, a través de la observación y el diagnóstico de situación permitió contar con información cuantitativa y cualitativa indispensable para el mejoramiento de las condiciones de desarrollo personal y profesional de hombres y mujeres en las Fuerzas Armadas. El Observatorio se ocupa de cuestiones socio – culturales, asegurando una mayor inserción institucional a través de su dependencia y funcionamiento en el ámbito de la Secretaría de Asuntos Militares.
La creación del Consejo de Políticas de Género, garantizó la presencia permanente de representantes de la Dirección Nacional de Derechos Humanos y de la Secretaria de Asuntos Militares. Con esto, se pudo consolidar mejores condiciones para la inserción transversal de la perspectiva de género en las distintas áreas de gestión de este Ministerio.
Para reforzar la atención institucional a la temática, se impulsó una reforma organizacional en el Ministerio, incorporando un reconocimiento formal y expreso de las cuestiones de género entre las funciones de la Dirección Nacional de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario, como parte irrenunciable de la política integral de Derechos Humanos para las Fuerzas Armadas. (Extracto del prólogo)